jueves, 5 de abril de 2012

... Todo depende de la actitud mental de cada uno ...


... Y como decía el último Dalai Lama en un Congreso hace poco tiempo, "todo depende de la actitud mental de cada uno". Y esto me lo trato de repetir a menudo y bien es cierto que lo observo en mi misma y en muchas personas. Veo que algunas personas bajo las mismas circunstancias actúan de forma diferente o tienen diferentes actitudes ante las diferentes pruebas que se van encontrando: dificultades a la hora de encontrar empleo, cuidado y educación de los hijos, estudios, dificultades laborales, etc. Ante las mismas dificultades o muy similares reaccionamos de forma diferente, unas personas de una forma más adaptativa, otras personas de una forma más serena y positiva, otras de una forma más agobiada/estresada... y es que, al final es cierto... todo depende de la actitud mental que tengamos y eso hay que trabajarlo, porque la verdad que no suele venir de serie...

Un ejemplo muy básico de esto es el tiempo. Sí, sí, el tiempo parece una tontería... Cuando están los días bonitos, en los que luce el sol, en los que hace calorín, en los que huele a primavera o verano, parece que nada más levantarnos y mirar por la ventana se nos ilumina la cara. Se nos dibuja una sonrisa y parece que ya estamos cargados para todo el día. No sé... parece que es más fácil enfrentarse al día que nos espera. Y bien cierto que es así, las condiciones son favorables, el tiempo es favorable y resulta más fácil ver la vida de forma positiva. Si nos observaos, seguro que ese día vamos caminando por la calle y tenemos una sonrisilla en la cara, somos más educados con las personas con las que vamos tratando a lo largo del día, no nos enfadamos tanto, hacemos todas las cosas de mejor gana (cocinar, limpiar, sacar al perro, vestirnos, organizar...).

Pero... y cuándo un día y otro y otro el tiempo es malo???. La actitud cambia y si no es en el primer día es en el segundo y vamos si ya coincide con domingo y al día siguiente hay que ir a trabajar... peor que peor jejeje (personalmente a mi los domingos se me hacen MUY cuesta arriba, estoy tratando de cambiar la perspectiva :D ). En los días lluviosos, parece que sólo apetece quedarse en casa, echado en el sofá, tapadinos con una manta hasta arriba y alaaaa nos dejamos llevar por la pereza y la apatía. Ojo, con esto no quiero decir que esté mal hacer esto, que bahhh, esto a veces es sumamente necesario para descansar, pero hemos de reconocer que a veces nos pasamos, jejejeje. El caso es que... volver a observaos, pero en estos días ya no vamos tan alegres por la calle, además si llueve, solemos cargar con el paraguas de un sitio a otro y esto ya nos supone un engorro, suele haber mucha humedad, lo que encrespa el pelo y al género femenino nos suele poner de bastante mal humor...




Y es que todo es cuestión del poder mental de cada uno, porque si es verdad que cueste menos estar alegres, serenos y de buen humor los días que luce el sol, pero eso no quiere decir que los días lluviosos no podamos estar igual. Nos costará un poquitín más, pero podemos hacer por cambiarlo. Además, esto de ser amables y estar de "buen rollo" ye contagioso y recíproco, jejeje.

Pues lo mismo pasa en la vida cotidiana. Cuando las condiciones son favorables (nos cae bien alguien, estamos a gusto en el trabajo, la situación no nos altera...) pues es más sencillo ser educado, ser amable, estar con una sonrisilla en la cara, tener un tono de voz calmado y suave... Cuando no estamos a gusto en una situación... aparece la impaciencia, el mal humor, el tono de voz más seco, incluso estamos inquietos y nerviosos, a nivel fisiológico nos pueden hasta entrar sofocos, ponernos colorados o sentir calor en la cara, sentir que empezamos a sudar... Bien es cierto que las afinidades y gustos juegan aquí un papel muy importante, pero hemos de reconocer que el estado de agitación y nerviosismo que nos pueden generar algunas situaciones y personas, se puede disminuir, incluso llegar a desaparecer. Ojo!!, no digo que tenga que desaparecer y que nos tengamos que sentir tan a gusto como en la situación contraria, pero sí que se puede llegar a controlar con trabajo y esfuerzo y eso nos hará sentirnos más cómodos.


Y este simil entre el tiempo, las relaciones y situaciones cotidianas es uno de tantos que ocurren a lo largo de nuestras vidas, en cada situación, con cada persona, en cada etapa vital... y al final todo se resume a lo mismo que TODO ES CUESTIÓN DE LA ACTITUD MENTAL DE LA PERSONA. Sé que esto es fácil decirlo y es complicado llevarlo a la práctica, pero con trabajo y tesón se consigue ;) porque... quién dijo que la vida fuera sencilla????

Disfrutad de estos días de descanso, y tratad de disfrutar de cada día de vuestra vida!!! :D

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